domingo, 30 de diciembre de 2012

Bed of roses

Es un songfic de la canción Bed of roses de Bon Jovi. Pretende evocar cómo se sintió Jon a la hora de escribir esta canción.





Me siento delante del piano y presiono las teclas en un conjunto de melodías disonantes que se amontonan en mi mente, aumentando el dolor. Aún tengo el alcohol en la cabeza, pero no consigo olvidarla. Su cabello rubio y sus ojos verdes como esmeraldas se han quedado grabados a fuego en mi corazón. Cuando desperté ya no estaba; comienzo a pensar que no fue más que un sueño. Pero lo siento tan real que aún creo tenerla en mi cama.

Sitting here wasted and wounded
at this old piano
trying hard to capture the moment
this morning I don't know
'cause a bottle of vodka's
still lodge in my head
and some blond gave me nightmares
I think she's still in my bed.


Sí, realmente me encuentro cansado, y también algo perdido. Porque nadie diría que, sentado en la barra del bar, ella me sonreiría de esa manera. Sonrisa de dientes blancos y textura sincera, pero todas las promesas de amor que pudimos habernos hecho ya quedaron olvidadas. 


As I dream about movies
they won't make of me
when I'm dead.

With an ironclad fist I wake up
and French kiss the morning
while some marching bands keeps
it's own beat in my head
while we're talkin'
about all of the things that I long to believe,
about love the truth and
what you mean to me
and the truth is...
Baby you're all that I need.


Y es que allí sentada era perfecta. Oh, viejo piano, ¿cómo describirla? ¿Y cómo describir lo que sentí al verla allí sola, sonriendo de manera ausente?


I wanna lay you down in a bed of roses.
For tonight I sleep on a bed of nails.
I wanna be just a close as
the Holy Ghost is
and lay you down on a bed of roses.


Ahora, lo único que conservo de ella son recuerdos y un número de teléfono. Y ojalá los teléfonos nos pudieran transportar a donde queremos porque mi único deseo es que estemos juntos. Pero estamos tan lejos que temo que cada paso me aleje más de la ella y me lleve de vuelta a casa. Lo que daría cada noche por verla de nuevo...


Well I'm so far away
that each step that I take is on my way home
a kings ransom in dimes I'd give each night
just to see throught this payphone.
Still I run out of time
or it's hard to het throught
till the bird on the wire flies me back to you
I'll just close my eyes and whisper
Baby blind love is true.


Tan perfecta que esta noche era sólo para los dos. Y ardía en deseos de tumbarla en la cama, y llenarla de besos, besos como pétalos de rosa, besos que no se olviden fácilmente. Sabía que al día siguiente no estaría. Simplemente quería disfrutar del momento.


I wanna lay you down in a bed of roses.
For tonight I sleep on a bed of nails.
I wanna be just a close as
the Holy Ghost is
and lay you down on a bed of roses.


Y también la resaca parece haber desaparecido, pues ahora ya sólo conservo lo que no sé si fue real o imaginado.


The hotel hangover whiskey's gone dry.
The barkeepers wig's crooked
and she's giving me the eye.
I might have said yeah
but I loughed so hard I think I died.


Sea como fuere, quiero que sepa que estaré pensando en ella. Que querré volver a su lado, volver a vivir lo vivido, y lo haría mil veces más. Esta noche no estuve solo, y fue gracias a ella.


While you close your eyes
know I'll be thinking about you
while my mistress she calls me
to stand in her spotlight again.
Tonight I won't be alone
but you know that don't mean
I'm not lonely.
I've got nothing to prove
for it's you that I'd die to defend.


Detengo momentáneamente la melodía, mientras las memorias salen a flote. Si en algún lado ella escucha esta canción... quiero que recuerde que sólo deseo tumbarla en una cama de rosas.


I wanna lay you down in a bed of roses.
For tonight I sleep on a bed of nails.
I wanna be just a close as
the Holy Ghost is
and lay you down on a bed of roses.


Sólo en una cama de rosas...


I wanna lay you down in a bed of roses.
For tonight I sleep on a bed of nails.
I wanna be just a close as
the Holy Ghost is
and lay you down... on a bed of roses...

domingo, 9 de diciembre de 2012

Amigas para siempre. Capítulo I.

Tais se dirigió hacia mí seguida, como siempre, de sus habituales perritos falderos. Esa chica rodeada de muchachas plásticas y vacías era, aunque no lo pareciera, mi mejor amiga desde que llegué a la ciudad. Yo siempre he sido una muchacha marginada, callada y sin apenas vida social; por eso, en su día, me sorprendió sobremanera que Tais se acercara a mí.

Tais era una chica rubia y de profundos ojos verdes. Era una persona sin problemas económicos, porque su padre dirigía una gran empresa. Tampoco tenía problemas sociales, porque era hermosa y su dinero atraía a un montón de buitres. Aun así, la conocía mejor que nadie y sabía que no soportaba a esas arrastradas que tenía por "amigas", pero si andaba con ellas era sólo por mantener su reputación. No la culpaba, nadie quería ser como "la amargada de 4-A", o sea, yo. Sí... la mayoría me conocía por ese nombre, y yo ya me había acostumbrado.

Sin saber cómo, porque no estuve prestando atención, Tais se libró de las ratas con las que venía y caminó hacia mí con una gran sonrisa.

-¡Hola, Abigail!

Yo le sonreí y saludé de vuelta.

-¿Qué les has dicho para que se fueran?-pregunté, refiriéndome al grupo de sacos de maquillaje que se ha dispersado hace un momento (sí, las nombraba con tanto cariño... no sabía ni sus nombres, no me interesaba).

-Que ahora tenía que ir a la biblioteca y estaría ocupada. Que, si eso, ya hablaríamos luego. Ya sabes, la palabra "biblioteca" es veneno para ellas-respondió, riendo a carcajadas.

Yo me reí a mi vez, mostrando unos dientes que, al lado de los de mi amiga, parecían desiguales, disparejos y sucios. Ella me tomó de la mano y nos dirigimos fuera del edició, hacia un lugar del patio oculto por los árboles. Adoraba ese sitio, nunca venía a molestarnos nadie.

*-*-*-*


Tras quince minutos de recreo, Tais y yo nos vimos obligada a regresar a las clases, que discurrirían aburridas, como siempre, porque no estaríamos juntas. Volvimos al instituto entre risas y, de repente...

-¡Tais! ¿Qué haces con la amargada de 4-A?

Una de sus "amigas" nos había visto juntas, y nos lanzó esa pregunta con voz nasal y veneno impregnado en cada palabra, mientras yo me sentía pequeña ante su mirada de asco.